El hilo rojo
El hilo rojo
Un espacio para conversaciones profundas para la transformación consciente.
Construyamos un nuevo mundo consciente, en lo personal y en lo profesional, enfocados a los líderes actuales y visionarios conscientes, porque tirando del hilo llegamos a lugares insospechados y muy nutritivos.
Dragon Dreaming con Santi Scheele y Bea Gallego
Serenidad con Mireia Anglada
Cuentos con Ramon Glieneke
Regeneración con Santiago Scheele
Resiliencia con Javier Escalante
Mejora Continua con Sandra Gil
Pasión con Roger Llaveria
Presencia con Marta Esteve
Facilitación con Bugui García
Equilibrio con Sergio de Miguel
Ilusionina con Javier Ondarra
Instinto con Anna Sabaté
La leyenda
La leyenda
Un anciano que vive en la luna sale cada noche a conocer a los recién nacidos y ata un hilo rojo a su dedo.
Un hilo que decidirá su futuro. Un hilo guiará a estas almas para que nunca se pierdan.
Una leyenda popular que se recita en casi todos los hogares japoneses a los niños y jóvenes es esta.
Hace mucho un emperador se enteró de que en una de las provincias de su reino vivía una bruja muy poderosa que tenía la capacidad de poder ver el hilo rojo del destino. La mandó traer ante su presencia.
Cuando la bruja llegó, el emperador le ordenó que buscara el otro extremo del hilo que llevaba atado al meñique y lo llevara ante la que sería su esposa. La bruja accedió a esta petición y comenzó a seguir el hilo
Esta búsqueda les llevó hasta un mercado en donde una pobre campesina con una bebe en brazo ofrecía sus productos
Al llegar hasta donde estaba esta campesina se detuvo frente a ella y le invitó a ponerse en pie e hizo que el joven emperador se acercara y le dijo aquí termina tu hilo, pero al escuchar esto el emperador enfureció creyendo que era una burla de la bruja
Empujó a la campesina que aún llevaba a su pequeña hija en brazos y le hizo caer haciendo que la bebe se hiciera una gran herida en la frente. Luego ordenó a sus guardias que detuvieran a la bruja y le cortaran la cabeza.
Muchos años después llegó el momento en que este emperador debía casarse y su corte le recomendó que lo mejor fuera que se desposara a la hija de un general muy poderoso. El emperador aceptó esta decisión y comenzaron todos los preparativos para esperar a quien sería después la elegida como esposa del gran emperador
Llegó el día de la boda pero sobre todo había llegado el momento de ver por primera vez la cara de su esposa.
Ella entró al templo con un hermoso vestido y un velo que le cubría totalmente el rostro. Al levantarle el velo vio por primera vez que este hermoso rostro tenía una cicatriz muy peculiar en la frente. Era la cicatriz que él mismo había provocado al rechazar su destino años antes. Un destino que la bruja le había puesto frente al suyo y que decidió no creer.
Recuerda: Un hilo rojo invisible conecta a aquellos que están destinados a encontrarse sin importar tiempo , lugar o circunstancias. El hilo rojo se puede estirar, contraer o enredar pero nunca romper.
Recuerda: Un hilo rojo invisible conecta a aquellos que están destinados a encontrarse sin importar tiempo , lugar o circunstancias. El hilo rojo se puede estirar, contraer o enredar pero nunca romper.